Cumpliendo los deseos nocturnos de Lara y Martina, habilidosamente los doy placer con mi lengua.Cambiando a mis pies, exploran ansiosamente, dejándome al borde.Montándome, Martina cabalga con fervor, haciendo eco sus gemidos.Lara se une, sus susurros italianos tejiendo una sinfonía de éxtasis.